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Beneficio de beber zumo o jugo de frutas, hortalizas, verduras y hiervas curativa


Beber el zumo o jugo producto de fruta, verdura, hortalizas e incluso diversas hierbas curativas es una de las formas más cómoda y divertida de obtener una alimentación sana y equilibrada.

Las frutas nos ayudan con una gran cantidad de beneficios, no sólo por tener una infinidad de vitaminas y otros nutrientes para nuestro organismo, sino también, por ser una deliciosa bebida, siempre en cuando se haga en su moderada preparación. Tanto si es recién exprimido, recién prensado, concentrado, el zumo o jugo de frutas es un excelente elemento a incluir en la dieta ya que sus nutrientes son asimilados en un 95% en nuestro cuerpo. Como resultado de ser asimiladoras de la energía solar y cósmica, los jugos de frutas fortalecen, revitalizan y depuran ayudando a reconstituir las células, desintoxican y energizan nuestro cuerpo. Las verduras, además de sus componentes vitamínicos y minerales contienen clorofila, la cual tiene grandes propiedades terapéuticas (demostrado científica mente); esta última produce el intercambio entre oxígeno y bióxido de carbono, es tal la importancia de los vegetales que sugiere que debemos integrar dentro de esta terapia saludable algunas yerbas curativas, ampliando su utilidad en diversos problemas y padecimientos corporales.

INDICE DE FRUTAS Y BEBIDAS NATURALES

JUGOS BATIDOS ZUMOS IGUAL A SALUD

viernes, 19 de marzo de 2010

LECHE MERENGADA





Ingredientes para 4 personas:

- 1 litro de leche entera
- 4 claras de huevo
- 150 g. de azúcar
- una varita de canela en rama
- 1 cucharada de agua de azahar (optativo)
- canela en polvo o chocolate rallado para decorar

Preparación:

1. Poner a hervir la leche con la canela en rama y el azúcar. Cuando haya cocido unos minutos, apartarla del fuego, retirar la canela y dejar enfriar.
2. Entre tanto, habría que montar las claras a punto de nieve fuerte.
3. Cuando la leche se haya enfriado, incorporar el agua de azahar y las claras batidas, removiendo con cuidado para que se mezclen con la leche sin bajarse.
4. Meter el recipiente en el congelador; remover cuando esté a medio helar (la leche merengada no ha de quedar muy dura).
5. En el momento de servir, distribuir la leche merengada en copas o cuencos para helado. Espolvorear la superficie con canela en polvo o chocolate rallado.

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